En sentido estricto, el término
amianto (Real Decreto 396/2006) designa a los silicatos fibrosos
siguientes, de acuerdo con la identificación admitida internacionalmente del registro de sustancias
químicas del Chemical Abstract Service (CAS):
a) Actinolita amianto, n.º 77536-66-4 del CAS.
b) Grunerita amianto (amosita), n.º 12172-73-5 del CAS.
c) Antofilita amianto, n.º 77536-67-5 del CAS.
d) Crisotilo, n.º 12001-29-5 del CAS.
e) Crocidolita, n.º 12001-28-4 del CAS.
f) Tremolita amianto, n.º 77536-68-6 del CAS.
El amianto o asbesto, como tal, es un grupo “artificial” que reúne minerales de diversas familias de silicatos: anfíboles y serpentinas. Pese a tener un origen geológico diferente, la característica común de todos estos minerales es que forman agregados de fibras.
Debido a la forma microscópica que poseen (fibras), consiguen unas características que los diferencian del resto de minerales:
- Aislante eléctrico
- Aislante acústico
- Aislante térmico
- Muy fácil de combinar con otros productos como el cemento
- Resistente al desgaste, abrasión y fricción
- Resistente al fuego
- Resistente a la biodegradación: líquenes, hongos, algas y plantas
- Resistente a fuerzas de tracción
- Resistente a la gran mayoría de químicos: es inerte
- Se pueden entrelazar sus fibras para formar hilos, cordones o tejidos
Por todo ello, las fibras de amianto son, esencialmente indestructibles. Por ello, durante mucho tiempo fueron empleadas en la elaboración de materiales con infinitud de aplicaciones, y aún sigue siendo así en ciertos países donde todavía se extrae, manipula y comercializa.
Con todas las ventajas que ofrece el amianto, y desde que se evidenciaron los problemas de salud asociados a la inhalación de sus fibras, su popularidad ha ido disminuyendo y ahora mayoritariamente se contempla como un problema para la salud.
En España, a pesar de haberse prohibido su utilización, producción y comercialización de amianto en 2001 (Orden de 7 de diciembre de 2001), todavía está presente en muchos materiales que forman parte de nuestro día a día, lo cual es un problema ya que estos materiales que contienen amianto se han ido degradando con el paso del tiempo, y se encuentran en pleno proceso de alteración, desprendiendo fibras de amianto al aire.